ImprimirMonoblocs, equipos clave para una rehabilitación sostenible de viviendas
Se ha debatido mucho sobre la relevancia de la rehabilitación y la eficiencia energética como impulsores de un cambio estructural en el sector. Si nos centramos en la situación del mercado, no hemos avanzado lo suficiente, aunque estamos en el buen camino. La rehabilitación de edificios y la mejora de la eficiencia energética son temas cruciales para abordar los desafíos actuales relacionados con el cambio climático y la sostenibilidad, y además cumplir con los retos que nos marca la Unión Europea.
En Eurofred estamos convencidos de que la rehabilitacion de los edificios continuará siendo un valor al alza. No hay vuelta atrás si queremos cumplir con la Agenda 2030 y 2050. Estas acciones no solo contribuyen a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que también pueden generar beneficios económicos, sociales y medioambientales.
Existen normativas que empujan en esta dirección, un buen ejemplo es el CTE, que establece diversas exigencias sobre el uso de las renovables y la limitación de la demanda energética que convierten a la aerotermia en la solución ideal para cualquier proyecto. Sin embargo, el avance de estas tecnologías en España está siendo más lento que en otros países y la manera en la que el Gobierno ha gestionado las ayudas Next Generation seguramente ha influido.
Los objetivos de la Unión Europea son muy ambiciosos en el horizonte 2030 y 2050 en rehabilitación energética, lo que también supone una oportunidad para el desarrollo del sector. Pese a no avanzar tan rápido como sería deseable, si todo el sector se compromete, estamos a tiempo. En este sentido, la concienciación crece, tanto del lado del profesional como del consumidor. Así lo refleja nuestro Barómetro de Sostenibilidad, con casi un 70% de los negocios afirmando poner en marcha acciones sostenibles en materia de medioambiente y un 52,4% respondiendo que, en el actual contexto de crisis energética, es bastante o muy probable que los usuarios finales opten por estos sistemas, ya que priorizan el ahorro por encima del precio de la instalación.
Desde el punto de vista del mercado, la aerotermia se está estabilizando y deja atrás los altos crecimientos que estábamos observando los últimos años. A ello se suma la falta de subvenciones, que también podría influir en esta ralentización, ya que casi el 80% de los participantes de nuestro Barómtero afirmaron que no hay disponible suficiente información sobre las subvenciones para particulares, lo que podría sugerir cierta infrautilización.
Y del mismo modo, si nos centramos en la rehabilitación, un reto importante es el hándicap económico que supone el hecho de que, para sustituir las calderas convencionales, muchas veces sea necesario adecuar la instalación. A este respecto, es importante decir que en el mercado ya existen bombas de calor basadas en la aerotermia que permiten abordarlo, como la Monobloc Active de Daitsu, que funciona con refrigerante natural R290 de altas prestaciones térmicas y es compatible con radiadores de alta temperatura al producir agua caliente hasta 75ºC.
No es de extrañar que debido a su tamaño compacto, su alto rendimiento y adaptabilidad, la Monobloc Active de Daitsu se haya consolidado como la opción a elegir en proyectos domésticos de rehabilitación y planes Renove de calderas. Es compatible con los radiadores domésticos habituales, cuenta con una clasificación energética A+++ y con valores COP entre 3 y 6,4. Este sistema multitarea ofrece la máxima eficiencia energética gracias a la tecnología aerotérmica, la tecnología Full Inverter de su compresor y ventilador, y el gas refrigerante ecológico R290, que permite que la unidad funcione a presiones mínimas y reduzca un 41-45% las emisiones de CO2. Además, está diseñada para trabajar hibridada con solar térmica y/o fotovoltaica, aumentando aún más su eficiencia y ahorro.
En esta misma línea, puede conectarse a través de protocolo Modbus e incluye una tarjeta SIM que permite el control remoto a través de un dispositivo móvil. Esto no solo mejora la usabilidad y el confort, también ofrece estadísticas de consumo e identifica ineficiencias. Todo ello redunda en el ahorro energético: entre 278 y 696 euros al año y una amortización de la inversión de 5,6 a 13,9 años, en función de la vivienda.
Con este tipo de soluciones integrales, desde Eurofred buscamos facilitar los proyectos de climatización residenciales, comerciales e industriales. El objetivo es común: mejorar la eficiencia de las instalaciones para garantizar el control en el consumo energético y ofrecer el máximo bienestar.
